Telepathy, el primer paso a la integración de la tecnología y la neurociencia
Pocos conceptos son tan mágicos como la telepatía. Mover cosas con la mente, sin mover un solo dedo... Es un poder de inimaginables proporciones e incontables usos. Es bonito pensar en aquellas cosas que arreglarían muchos de los problemas de nuestra vida, desde darle una nueva vida a personas con discapacidad... a cambiar de canal sin usar control remoto. Algo tan revolucionario no podría existir... o sí?
Llevamos bastantes años escuchando sobre Neuralink, el proyecto insignia de Elon Musk que promete revolucionar. A pesar de ser algo que nunca nadie ha logrado, todo el mundo está familiarizado con el concepto: Un chip implantado en el cerebro, que como función principal tiene curar enfermedades cerebrales como la parálisis o el Alzheimer, pero todo el mundo lo espera expectante por otras cosas. Creo que a todos se nos viene a la mente jugar videojuegos en la mente, buscar en Google las respuestas de un examen o controlar robots con solo pensarlo.
Hace poco tuvimos unas de las noticias más importantes en el tema: por fin, insertaron el esperado chip en una persona voluntaria que anónimamente aceptó el reto, o riesgo, de ser el primero en probarlo. En la plataforma favorita de Elon, X, él publicó varios avances que se volvieron automáticamente virales. El mensaje que más interesó a nivel mundial fue que el paciente se está recuperando bien, y que en los primeros resultados se detectaron prometedores picos neuronales e impulsos nerviosos.
Historia
La empresa de Neuralink se fundó en 2016 pero no fue pública hasta 2019 en una presentación en directo del diseño. Presentaron dos prototipos: uno del chip, en donde muestran sus cables que conectan con el cerebro y otro del robot que pone el chip, al que se le hace una analogía para relacionarla con una máquina de coser. Elon Musk dijo que la máquina podría hacer la cirugía extremadamente fácil y nada invasiva, pero hay cierto escepticismo. "Estamos hablando de ingeniería sólida, pero neurociencia mediocre", sentenció uno de los expertos. El momento más importante y viral se dio en 2021 en plena pandemia. Un mono jugando Pong con la mente a cambio de un licuado de plátano. Se le enseñó a jugar con un control primero y luego cuando el chip funcionaba correctamente, se lo desactivaron para que jugara con la mente. A pesar de que se han logrado cosas que parecen increíbles y que Elon Musk ha estado orgulloso de presentar, realmente para algunos científicos no parece la gran cosa todavía. Y no todo ha sido color de rosa. También ha habido polémicas, sobre todo por el trato que se le ha dado a los monos de prueba que han pasado agonías como efectos secundarios, parálisis faciales, inflamaciones cerebrales y cosas más desagradables que preferimos no contar. Y así llegamos al presente en donde como vimos, ya se logró implantar en un humano, y ahora todo el mundo espera expectante a ver qué pasa.
Ventajas
Desventajas
En la misma historia de Neuralink vimos muchas polémicas que han criticado duramente el proyecto, pues es un proyecto a largo plazo y con alta capacidad de revolucionar, así como alta posibilidad de salir mal. Vimos el caso de los animales que por malos cuidados resultaron duramente afectados con efectos secundarios horribles, y también conocemos, o somos parte del amplio grupo de personas que son escépticas al respecto, y por nada del mundo se pondrían un chip en el cerebro por las implicaciones éticas y hasta religiosas que esto trae. Al ser un tema relacionado con el futurismo y la simbiosis de la tecnología con la humanidad, tenemos el derecho de soñar con futuros positivos, así como futuros en donde esta tecnología ya es parte de la humanidad, con todo y sus dilemas. Por eso soñemos por un momento aquellos dilemas aterradores que a todos se nos han cruzado en algún momento por la mente. Aquí no hay respuestas correctas, nadie sabe qué pasará.
Dilemas a futuro
Imaginen una sociedad en donde el chip te permita acceder a Google con total libertad. Se rompería por completo la barrera entre tu conocimiento y el del internet. La inteligencia dejaría de existir, porque todos tendríamos a la mano el conocimiento universal del internet, o, mejor dicho, no todos, y esa es otra problemática. No sabemos cuánto va a costar, pero es seguro que no estará disponible para todo el mundo. Las clases altas aprovecharán sus ventajas sin problemas, pero las clases bajas del mundo nunca lo tendrán o tardarán mucho, y esto separará aún más las brechas sociales. Nosotros, de clase media en un país tercermundista, quizá la mitad lo compremos y la otra mitad no, y esto generará brechas en la misma clase media, algo sin precedentes, y aquí va otro dilema. Qué pasará con los que no queramos meternos nada de eso en la cabeza? Quizá todos nuestros amigos se lo pongan y nosotros nos sintamos excluidos por no comprender muchas veces de lo que ellos hablan, finalmente cayendo a la presión social. Estos son dilemas lógicos y éticos, pero podemos irnos más allá. Ponernos creativos.
Imaginen un futuro en donde guarden sus recuerdos para verlos después y todo se vuelve más perfeccionista y minucioso. O un futuro en donde tus papás al nacer te pongan un chip que indique en todo momento donde estás o cuanto es tu ritmo cardiaco, o que secretamente registren lo que piensas para saber si tienes ideas suicidas o terroristas, y que antes si quiera de expresarlo, lleguen a silenciarte. O gente viciada con los videojuegos mentales que decidan simple y sencillamente no volver a abrir los ojos por largas horas, anuncios de Coca Cola en los sueños donde subliminalmente planten ideas sobre productos, o peor, ideas políticas o hasta de creencias. Después de todo, pocos sabremos cómo funciona realmente ese chip, y dejarnos meter algo hecho por el hombre en el cerebro apunta a problemas seguros.
No hay comentarios: